#ENTREVISTAS DESDE O CONFINAMENTO 04 Lucía Castaño entrevista a Noel, estudante e traballador nun centro de menores coma integrador

«Ahora nos damos cuenta de lo afortunados que somos»

 

 

Noel, un joven de 24 años, estudiante de Educación Social y trabajador en un centro de menores como integrador, nos contará su experiencia y cómo le está afectando a él la situación actual provocada por el COVID-19.

Elegí a mi hermano por el hecho de ser un joven activo, por lo que su rutina cambió bastante, además de un estudiante y un trabajador que debe seguir trabajando en plena pandemia.

 

¿En que te está afectando más esta situación que estamos viviendo?

Pues a nivel personal me está afectando en mi rutina diaria, ya que al estar confinados mi ritmo de vida ha cambiado. Lo que peor llevo es no poder ver a mis seres queridos. Por otro lado, en el ámbito laboral me afecta en cambios de horarios y jornadas más largas.

Foto de cottonbro en Pexels. Uso gratuíto

¿Cómo crees que será resuelto todo lo relacionado con los estudios y los cursos académicos? O, dicho de otra forma, ¿qué crees que sería lo más justo para todos vosotros?

Pues no sé que medidas se acabarán adoptando, creo que el retomar las clases va a ser muy complicado, pero que tampoco se debería parar totalmente el sistema educativo. El hecho de empezar el año que viene haciendo el mismo curso que este año no es justo, entonces creo que lo acertado sería seguir evaluando mediante trabajos o exámenes online a todos los alumnos, aprovechando las distintas plataformas que hay para comunicarnos. Eso sí, se debería dotar de instrumentos a todo el mundo, ya que hay familias que no disponen de ordenador, conexión a internet, etc.

 

¿Cómo fue tu reacción tras el comunicado de que el confinamiento se alargaba 15 días más de lo previsto?

Me lo esperaba. Otros países como China o Italia también adoptaron estas medidas y aquí, al ir por el mismo camino, se veía venir que iba a ser igual. Por otro lado, me parece lo más coherente, hay que anteponer la salud e intentar tomar todas las medidas posibles para acabar con el virus cuanto antes.

 

Dado a que tu profesión exige seguir trabajando, ¿qué nos puedes contar relacionado con ello?

Por un lado, es un alivio el poder salir de casa y desconectar de la rutina. Lo malo es que estás más expuesto a contraer el Covid-19 y te preocupa, tanto cogerlo tú como contagiar a tus familiares y usuarios con los que trabajamos.

 

¿Qué será lo primero que hagas en cuanto nos dejen volver a la rutina habitual?

Pues habrá que ver cómo evoluciona todo y qué medidas se adoptan, pero supongo que lo primero que haré será disfrutar de esas pequeñas cosas como son los paseos, hacer deporte al aire libre e ir a ver a mis familiares, por supuesto.

 

¿Qué tipo de población crees que lleva, o debería llevar, peor la situación? ¿Por qué?

Creo que quien lo lleva peor son aquellos que son más vulnerablesante el virus, como las personas mayores o la población de riesgo. Perotampoco hay que olvidarse de todas esas personas que tienen unasituación personal difícil, aquellas que han tenido o tienen problemaseconómicos para subsistir o todas esas personas que tengan que convivir enun ámbito de violencia de género.

 

Si tuvieses algo en tus manos y pudieses hacerlo, ¿qué cambiarías respecto a cómo se actuó, y se sigue actuando, frente a esta situación?

Creo que a toro pasado es muy fácil hablar. Es una situación sin precedentes y muy difícil de gestionar que supongo que las personas encargadas de tomar las decisiones lo han intentando hacer de la mejor forma posible.

 

¿Qué dirías que es esa cosa la cual antes no valorabas y tras esta situación te diste cuenta del valor que tenía realmente?

Pues las cosas más cotidianas de nuestras vidas: los paseos, las conversaciones cara a cara, poder ir al supermercado sin riesgos, ir al gimnasio…, la rutina en general, a veces no la valoramos, pero ahora nos damos cuenta de que somos unos afortunados.

 

Y, por último, ¿qué moraleja sacas de todo esto que estamos viviendo?

La moraleja que saco es que hay que tener más empatía. Las problemas que suceden "al otro lado del charco" siempre nos dan igual. Situaciones de pandemias en otros continentes, o diferentes tipos de catástrofes, pasan desapercibidas para nosotros cuando no debería de ser así. Con esto que estamos viviendo, nos damos cuenta de que también nos puede pasar a nosotros, que nadie ni nada está libre de sufrir algo parecido y de que no somos invencibles. Esto también me hace aprender que hay que valorar la vida, lo que tenemos y a quien nos rodea, porque no sabemos nunca en qué momento podría acabar.

 

LUCÍA CASTAÑOS RAMOS. 1.º E BACH.