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MICHEL DE MONTAIGNE

MICHEL DE MONTAIGNE

El ensayista y filósofo francés Michel de Montaigne (1533-1592)tal vez haya sido uno de los últimos niños de Europa que habló latín como primera lengua. En el castillo de su familia, al suroeste de Francia, hasta los criados lo hablaban con fluidez: el acaudalado padre de Montaigne los había contratado para que su hijo estuviera rodeado del soniquete de latín hasta que se marchara a la escuela con seis años.

Montaigne acabaría siendo célebre por ser uno de los pensadores más eruditos de la Europa renacentista, lo que tal vez no sea raro para un niño que leía a Virgilio e su lengua original. Sus ensayos (fue el primer ensayista porque inventó el término) llamaban la atención por su originalidad, su escepticismo ante las tradiciones políticas y religiosas, por sus comentarios mordaces sobre la naturaleza humana, así como por el inmenso espectro de referencias clásicas con que estaban aderezadas sus argumentaciones.

Cuando terminó la escuela, trabajó durante un breve período como abogado para el gobierno de Burdeos y se casó en 1565. Sin embargo, abandonó su empleo a los treinta y siete años y regresó al castillo de la familia, decidido a llevar una vida de reflexión erudita.

Los primeros dos volúmenes de sus Ensayos aparecieron en 1580, y el tercero en 1588. En ellos, elegía temas generales (el matrimonio, la religión, la falta de honestidad, el miedo, etc.) y los desmenuzaba introduciendo siempre orientaciones nuevas y provocativas al respecto. En un ensayo sobre el canibalismo, por ejemplo, divaga con varios miles de palabras (citando a Aristóteles, la leyenda de la Atlántida y la filosofía estoica), antes de formular el asombroso argumento de que los europeos tienen poco fundamento para criticar a los caníbales, puesto que la tortura de un cuerpo vivo es mucho más reprobable que comerse otro muerto.

La decisión de Montaigne a la hora de cuestionar la presunta superioridad de la civilazión occidental lo convirtió en una voz inusual en la Europa renacentista. También se opuso a la colonización europea de América argumentando que sembraría la desgracia para los indígenas americanos.

Montaigne murió en 1592 en su castillo, pero sus ensayos siguieron estimulando y provocando reflexión y debate durante siglos. “Los escritos de ese hombre”, escribió sobre Montaigne el filósofo Fiedrich Nietzsche (1844-1900), “no han hecho más que incrementar el goce sobre la tierra”.

DATOS DE INTERÉS

1.       Montaigne fue nombrado alcalde de Burdeos para un período de cuatro años a partir de 1581: trató de evitar la responsabilidad, pero recibió una carta escrita directamente por el rey Enrique III (1551-1589) ordenándole aceptarla.

2.       El término ensayo procede de la palabra francesa essai, que significa “tentativa”. Cada ensayo, a juicio de Montaigne, era un intento de comprender el tema que se trataba. Ensayar tiene también la acepción menos frecuente de “intentar” o “proponerse”.

3.       Los escritos de Montaigne se publicaron por primera vez traducidos al inglés en 1603. Algunos especialistas han especulado con la idea de que tal vez William Shakespeare (1564-1616) hubiera leído y se hubiera inspirado en Montaigne, concretamente para escribir La Tempestad que parece haber recibido influencia directa del ensayo de Montaigne sobre el canibalismo.

 



story | by Dr. Radut