Skip to Content

Xaneiro 2016

La guerra de los botones
de
Louis Pergaud
Novela que retrata a vida infantil do autor, nunha época na que os nenos vagaban libres polos camiños fuxindo dos castigos do mestre e da vara do  pai, planeando tácticas bélicas de gran crueldade  para enfrontarse aos nenos do pobo veciño, os seus inimigos. O libro debe o seu título ao feito de que cando un neno cae en mans do bando inimigo, este humilla ao vencido desposuíndoo de botóns, corchetes, ollais, cordóns. Todo un dispendio de violencia física, linguaxe vulgar e expresións ás veces bastas visto coa tenrura dun narrador nostálxico e irónico que continuamente interfire na historia (presunta autobiografía). Tamén se enxalzan valores como a amizade e o compañeirismo entre os protagonistas que permanecen unidos  e comparten o pouco que teñen.

 

- Pero... ¡Rediós!  ¡So cerdo! ¡So marrano!  ¡So golfo!¡so gandul! -gruñía el padre a cada nuevo hallazgo-. ¡Ni un  botón en el jersey, ni en la camisa, alfileres en la bragueta, un imperdible para sujetar el pantalón, cuerdas en los zapatos! Pero, ¿de dónde vienes así, pedazo de canalla? -rugió Pacho padre, dudando de que él, un ciudadano sensato y respetable, hubiera podido procrear semejante granuja, mientras la madre se lamentaba del continuo trabajo que aquel tunante, aquel pillo, aquel cerdo de hijo le daba todos los días. ¿Y te piensas que esto va a seguir así? -continuó el padre-. ¿Que me voy a gastar los cuartos pa alimentar y educar a un mamarracho como tú, que no da ni golpe ni en casa ni en la escuela ni en ningún sitio pues esta misma tarde he hablado con el maestro?
- ¡...!
- Por lo pronto, hoy te quedas sin cenar. ¡Contesta,rediós! ¿Dónde te has puesto así?
- ¡...!
- ¡Conque no quieres confesar nada, ¿eh,golfo? Pues muy bien. Espera un poco, rediós, y ya verás si te hago hablar o  no. ¡Vas a ver ahora!
Y cogiendo una vara de avellano flexible y recia del haz de leña que había junto a la chimenea, y arrancándole la camisa y bajándole los calzones, el padre de Pacho propinó a su descendiente, que se revolvía, se retorcía, rabiaba, protestaba y chillaba, chillaba hasta hacer retemblar los cristales, una de esas palizas que marcan un hito en la historia de cualquier rapaz.
(...)

 

Tamén tes a película:



page | by Dr. Radut