Las bibliotecas escolares gallegas destacan en las estatisticas estatales

El director general de Centros y Recursos Humanos dio cuenta hoy en el Parlamento de Galicia de la estrategia de impulso de estos espacios que se está desarrollando al amparo del Plan LÍA

Jue, 08/02/2018 - 11:11

El director general de Centros y Recursos Humanos de la Consellería de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria, José Manuel Pinal; dio cuenta hoy en la Comisión 4º del Parlamento de Galicia de la estrategia que se está desarrollando desde lo Gobierno gallego para el impulso de las bibliotecas escolares a través del Plan LÍA  (Lectura, Información y Aprendizaje) 2016/2020 de Bibliotecas Escolares, la hoja de ruta de la que se dotó la Consellería de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria para continuar su trabajo a favor de las bibliotecas escolares y el fomento de la lectura en los próximos años.

El éxito de las medidas puestas en marcha a través ya de la anterior fase del Plan (en funcionamiento en el período 2010/2015) queda reflejado, tal y como indicó el director general, en la estadística sobre bibliotecas escolares que publicó el Ministerio de Cultura, Educación y Deporte en el curso 2015/2016, que muestra resultados para Galicia superiores al promedio en la mayor parte de los ítems. De este modo, Galicia destaca en el porcentaje de centros públicos que utilizan su biblioteca para el tratamiento de la información y la competencia digital (el 65,5%), que ofertan formación específica para las personas  usuarias (lo hacen ocho de cada diez centros públicos) , programan encuentros literarios (el 80,7% de los centros), involucran directamente a las familias en sus actividades, o diseñan acciones especificas de atención a la diversidad, entre otras.

Centro creativo de aprendizajes

Esta segunda fase del Plan tiene como uno de sus objetivos lo de seguir dotando a los centros educativos de bibliotecas escolares útiles, estables, sostenibles y acordes a las necesidades del siglo XXI, con diferentes líneas de acción y medidas concretas. La este respeto el director general incidió en actuaciones como el Programa de Mejora de Bibliotecas Escolares (PLAMBE), en el que participan este curso 2017/18 un total de 646 centros  no universitarios sostenidos con fondos públicos; un programa que en el año pasado tuvo una inversión de 1.342.000 euros.

Dentro de los participantes en el PLAMBE, se seleccionaron 12 centros con trayectoria de excelencia y, preferentemente, de ayuntamientos rurales, con el objetivo de que exploren las posibilidades de evolución del modelo de biblioteca escolar cara un centro creativo de aprendizajes -abierto a toda la comunidad educativa mediante la introducción de nuevos espacios en el modelo actual y dotando de nuevas funcionalidades los ya existentes-, con los que la Consellería se colabora con orientación, pautas y seguimiento del trabajo realizado, difundiendo las buenas prácticas.   

Bibliotecas inclusivas y solidarias

Otra de las líneas prioritarias señaladas por el director general fue la de hacer de las bibliotecas un espacio para la inclusión. Para eso, se están desarrollando varias actuaciones con las que se pretende apoyar el desarrollo de las bibliotecas escolares de centros públicos de educación especial o comunes  que cuentan con unidades de educación especial, con la finalidad de que estas bibliotecas cuenten con los recursos necesarios para la atención del alumnado y ofrezcan a todos oportunidades adaptadas pero enriquecedoras, para la adquisición y el refuerzo de habilidades y competencias clave.

Entre ellas, destacó un programa específico dirigido a 53 centros de educación especial con asignación extraordinaria para mejorar los recursos de su biblioteca. De forma paralela, el profesorado recibe formación sobre la lectura adaptada, lectura fácil y otras posibilidades de aprovechamiento de los recursos de una biblioteca inclusiva.

Asimismo, el director general explicó que también se está ahondando en el papel de las bibliotecas escolares en pro de la equidad, la igualdad de oportunidades y las actitudes solidarias. En este sentido, el programa Bibliotecas Escolares Solidarias ? realizado en colaboración con la Dirección General de Juventud, Participación y Voluntariado- agrupa varias iniciativas de voluntariado cultural relacionado con las bibliotecas y la lectura como la concesión del sello Biblioteca Escolar Solidarila, el reconocimiento de horas de voluntariado a alumnado de secundaria (Voluntariado en la biblioteca escolar) o el impulso al voluntariado cultural ente alumnado de 5º y 6º de primaria que colabora en la gestión y en la dinamización de la biblioteca escolar y en otra actividades relacionadas con la lectura compartida, dentro y fuera del centro (Voluntariado de lectura ?La).

Otras iniciativas

José Manuel Pinal hizo un repaso por otros programas y líneas de actuación incluidos en el Plan LÍA como los Clubes de Lectura,  el Concurso de Trabajos por Proyectos, Radio en la Biblio, Proyecto E-LBE o los Escornabots; que son ?observados con interés por otras comunidades autónomas y por especialistas del ámbito de la lectura, de las bibliotecas y de la educación, como un ejemplo de actuación en estas materias?.

En el referido al futuro más inmediato, explicó que la segunda fase del Plan LÍA busca avanzar en la consecución de una biblioteca inclusiva, conseguir mejoras significativas en la comprensión, utilización y evaluación crítica de diferentes forma de información, facilitar al profesorado recursos, servicios y oportunidades para renovar prácticas educativas, incorporación de metodologías activas e integración de metodologías emergentes y, en definitiva, apoyar la adquisición de competencias clave del alumnado y contribuir a un mayor logro académico, mejores resultados y actitudes de aprendizaje y contribuir a la construcción de una sociedad lectora. ?La biblioteca escolar es una oportunidad para ejercitar las competencias intelectuales y emocionales, para convivir y construir ciudadanía?, dijo el director general.