Raquel Bugarín, pediatra do centro de saúde de Ribeira e persoa de referencia asignada ao noso centro, transmiteunos unha serie de recomendacións para o noso interese.
RECOMENDACIONES ACTUACION PADRES
- En caso de que su hijo tenga fiebre, tos, dolor de garganta, malestar, diarrea...o cualquier otro síntoma sugestivo de una infección, no debe acudir a clase. Se pondrán en contacto telefónico con su pediatra mediante la solicitud de una cita telefonica en las siguientes 24-48h si no se trata de una patología urgente.
- En caso de presentar síntomas de gravedad (dificultad respiratoria, mal estado general) póngase en contacto con el centro de salud o el 061.
- Si su hijo tiene síntomas que pueden ser compatibles con COVID, y siguiendo los protocolos vigentes, puede que el médico le solicite la realización de una PCR de coronavirus. Si esto ocurre, el niño y sus convivientes deben permanecer aislados hasta que tenga el resultado. En caso de que el paciente tenga hermanos en edad escolar, estos tampoco acudirán al colegio hasta que se tengan los resultados de la PCR del paciente.
- No se realizarán justificantes de ausencia escolar en el pediatra. Dichos justificantes deben ser realizados por los padres o tutores legales del menor.
Recomendaciones generales en niños con clínica de infección respiratoria:
Si tiene tos, fiebre, diarrea o cualquier otro sintoma sospechoso de una infección...no acudirá a clase
*Se considera fiebre una Tª axilar mayor de 38ºC. Aun así, no deberían acudir al colegio en caso de tener una Tª mayor o igual a 37.5ºC.
Si tiene fiebre o presenta molestias o dolor, se dará analgesia con los medicamentos habituales que le recomienda el pediatra, como paracetamol e ibuprofeno.
Cuando hay mocos y tos, siempre se deben hacer lavados nasales con suero fisiologico o preparados de agua marina. En los niños mayores debemos insistir en que se suenen si saben hacerlo.
En caso de presentar dolor de oído, garganta, barriga, cabeza… se le dará tratamiento para disminuir el dolor, con los medicamentos habituales que recomienda el pediatra, como el paracetamol y el ibuprofeno.
Es habitual que tras padecer un catarro, los mocos y la tos persistan 2-3 semanas, sin que eso signifique empeoramiento o no curación del cuadro. Tanto los mocos como la tos son un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo.
