“Siento la escuela como lugar de encuentros, de descubrimientos, de inventos y de aprendizajes.
Un lugar donde caben las emociones y los conocimientos, lo de cada uno y lo de los otros, lo sencillo y lo complejo.
Un lugar donde se da y se recibe, se habla y se escucha, se mira y se es mirado.
Un lugar cultural. Donde se cultivan las evoluciones personales y las colectivas, la belleza, la creación y las sensibilidades.
Siento la escuela como lugar tan templadito, igual se pueda ver un teatro, que bailar una polca, dibujar a un amigo, o ver una película buena.
Si no se nublan ni el tiempo ni los ánimos, que a ratos también pasa.”
Los pendientes de la maestra. O como piensa una maestra en los niños, las escuelas, las familias y la sociedad de hoy. Mari Carmen Díez Navarro .