Como viene ocurriendo año tras año, hay niños que de una manera más o menos continuada llegan tarde a clase por las mañanas, interrumpiendo la actividad docente.
La puntualidad es uno de los muchos hábitos educativos que debemos inculcar a nuestros menores, por lo que solicitamos la colaboración de los padres con la finalidad de evitar estos retrasos injustificados.
Por otro lado, si alguna vez surge algún imprevisto, deben dejar a los niños en conserjería y no llevarlos directamente al aula.
Muchas gracias por su colaboración.
La dirección.